Los problemas a la hora de captar clientes en un mercado legal cada vez más competitivo, la inexperiencia, la falta de orientación profesional y la creciente precarización laboral son los mayores obstáculos que identifican quienes se inician actualmente en el ejercicio de la abogacía.
Tras un análisis exhaustivo de esta problemática captada por el “I Estudio sobre la situación de la abogacía de Madrid”, el ICAM ha elaborado un plan de acción transversal para ayudar a los jóvenes a sortear las barreras que dificultan tanto su acceso como su progresión en la profesión jurídica. Se trata del Plan de Impulso Joven, una estrategia integral diseñada para fortalecer el desarrollo profesional de los jóvenes abogados que será presentada este martes en la sede de la corporación madrileña.
“Desde el ICAM pensamos que fomentar el desarrollo profesional de los jóvenes es fundamental en todas sus etapas. En primer lugar, para que conozcan todas las opciones formativas y laborales que tienen disponibles en el mercado. Y en segundo lugar, para que puedan contar con todas las habilidades necesarias para acceder a esas ofertas”, advierte Gabriel Rodríguez, Diputado responsable de abogacía joven.
Junto a la presidenta de la Sección de Iniciación Profesional del ICAM, Celia Herrero, han elaborado una iniciativa que se articula en torno a siete objetivos clave de desarrollo, cada uno respaldado por acciones concretas que buscan proporcionar a los abogados junior las herramientas y conocimientos necesarios para destacar en el competitivo mercado laboral actual.
Además de una orientación profesional avanzada, el plan abarca cuestiones fundamentales a la hora de emprender y progresar en el sector legal como la marca personal y el networking; el desarrollo de competencias en materia de comunicación, oratoria, liderazgo y gestión de equipos; o la adquisición de los conocimientos necesarios para administrar eficazmente las cuestiones financieras y contables de la práctica legal. Todo ello sin descuidar la formación jurídica y el cuidado del bienestar emocional y la salud mental.
Claves para iniciarse en la abogacía
El Plan de Impulso Joven fue presentado ayer en el ICAM, en un acto que contó con la intervención de Antonio Garrigues, y fue conducido por Gabriel Rodríguez y Celia Herrero, impulsores de este proyecto pensado para marcar la diferencia, y moderado por Alberto Cabello, presidente de AJA Madrid.
Gabriel Rodríguez puso de manifiesto que la orientación profesional “brilla por su ausencia en en la gran mayoría de las Universidades españolas”, lo que genera un doble problema: por un lado, los jóvenes no conocen las oportunidades profesionales que tienen disponibles y, por otro, no adquieren las habilidades necesarias para formar parte de ciertas profesiones que quizás sean de su interés en un futuro cercano. “Esto es lo que persigue el Plan de Impulso Joven: dar respuesta a este paradigma, dar respuesta a esta falta de orientación profesional que nos encontramos en las Universidades y que luego es muy difícil revertir en la en la etapa profesional”, aseguró.
“Creemos que este Plan Impulso puede ser la diferencia entre tener un buen empleo o no tenerlo. Entre tener una profesión que te llene o no tenerla. Creemos, en definitiva, que es la diferencia entre tener una vida profesional que te haga feliz o una que no. Y desde el Colegio de la Abogacía de Madrid queremos ser abanderados, queremos ayudar a que los jóvenes se formen aquí, adquieran esas habilidades aquí y conozcan aquí cuáles son todas sus opciones profesionales”, concluyó.
A continuación, tuvo lugar una conferencia magistral a cargo de Antonio Garrigues, quien destacó la importancia de contar con figuras inspiradoras en el ámbito de la abogacía para guiar y motivar a los jóvenes abogados. Garrigues subrayó la necesidad de ofrecer orientación profesional desde las universidades, permitiendo a los estudiantes conocer las oportunidades disponibles y adquirir las habilidades necesarias para su futura profesión, y enfatizó en la relevancia de la internacionalización en la carrera jurídica, brindando consejos específicos a aquellos abogados jóvenes que buscan expandir su práctica en el extranjero.
Durante su intervención, Antonio Garrigues también resaltó la importancia de apoyar y formar a los jóvenes abogados para que adquieran un perfil completo y se desarrollen profesionalmente y manifestó su compromiso de trabajar junto a las nuevas generaciones de abogados, brindándoles apoyo y mentoring para impulsar un ambiente de constante crecimiento y aprendizaje.
Como consejo final a los jóvenes abogados presentes en el acto, Garrigues recomendó “Tener fe en la profesión. La abogacía va a tener cada vez un papel más importante en la vida española. No tengáis el menor miedo en cuanto a la idea de que ser abogado es una profesión sin futuro, al contrario, es una profesión que tiene un futuro tremendo, pero tremendo. En cuanto pongáis en marcha la audacia para encontrar sitios, para encontrar márgenes de temas, veréis cómo vuestra vida se puede convertir en algo realmente importante. Insisto: un abogado español puede en estos momentos tener un futuro maravilloso si tiene un poco de audacia, puede trabajar en cualquier lugar del mundo”, afirmó.
Plan Impulso Joven
Gabriel Rodríguez y Celia Herrero presentaron los siete ejes de su Plan Impulso Joven pensados para dar respuesta a todas estas necesidades de formación que encuentran los jóvenes abogados. “Queremos acompañaros y detectar todas esas necesidades, tanto si queréis iniciaros en el mercado laboral, ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia, como si queréis dar un giro a vuestra carrera, porque al final todos los modelos de abogado tienen cabida en este Plan Impulso Joven”, aseguró Celia Herrero, presidenta de la Sección de Iniciación Profesional.
Orientación, Inserción y Desarrollo Profesional
El primer objetivo del plan es proporcionar a los abogados jóvenes las herramientas y conocimientos necesarios para facilitar su incorporación al mercado laboral, promover su crecimiento profesional y ayudarlos a trazar un plan de carrera. Para lograrlo, el ICAM ha diseñado una serie de talleres en universidades que abordan la orientación profesional, los diferentes tipos de empleos disponibles y las habilidades requeridas. Además, se impartirán talleres sobre la elaboración de CVs y cartas de motivación, así como sobre la superación de procesos de selección. Asimismo, se fomentará el acercamiento a la figura del headhunter y se organizarán charlas sobre las tendencias del mercado laboral. Las formaciones específicas estarán enfocadas en aumentar la empleabilidad de los jóvenes abogados y en diseñar planes de carrera profesional que les permitan alcanzar sus metas a largo plazo.
Marca Personal
Construir una marca personal sólida es crucial en el ámbito legal. Por eso, el segundo objetivo del plan es ayudar a los abogados jóvenes a construir y gestionar una marca personal única y diferenciada, tanto online como offline, que les permita destacar en el mercado laboral. Con ese propósito, se organizarán talleres sobre el uso de las redes sociales en la construcción de la marca personal y charlas sobre cómo gestionar la marca personal fuera de internet. Además, se ofrecerá la posibilidad de investigar y publicar de la mano de Abogacía Joven ICAM, así como formación sobre diseño de estrategias de branding.
Conocimientos Legales
Mantenerse actualizado y bien informado sobre las principales áreas del Derecho y las novedades legislativas es fundamental para cualquier abogado, de manera que el tercer objetivo del plan es asegurar que los jóvenes abogados tengan acceso a formaciones en las principales áreas del Derecho y a información sobre las novedades legislativas. Además, se facilitará el contacto con abogados con más experiencia, expertos en distintas especialidades, para que los jóvenes puedan profundizar en conocimientos especializados y prácticos.
Networking
El cuarto objetivo se centra en crear oportunidades para que los abogados jóvenes establezcan y amplíen sus redes profesionales tanto con compañeros con la misma experiencia como con abogados más experimentados. Para ello, se lanzarán programas de mentoring, como el proyecto puente intergeneracional, y se organizarán eventos de encuentro y networking para generar comunidad. También se llevarán a cabo talleres reducidos con figuras relevantes del sector, fomentando el intercambio de experiencias.
Salud Mental y Conciliación
El quinto objetivo del plan busca fomentar el bienestar emocional y físico de los abogados jóvenes, promoviendo prácticas saludables de gestión del estrés y la ansiedad. Para lograrlo, se organizarán talleres sobre la gestión del estrés y la ansiedad, así como sobre la conciliación entre la vida personal y profesional. Además, se compartirán testimonios de abogados con más experiencia que han logrado equilibrar estas facetas de manera exitosa.
Soft Skills
Las habilidades blandas centrarán la siguiente etapa del Plan de Impulso, con el fin de desarrollar competencias como la comunicación, la oratoria, el liderazgo y la gestión de equipos. Estas habilidades complementan el conocimiento técnico y son cruciales para una práctica legal efectiva. Para ello, se ofrecerán formaciones en comunicación y oratoria, redacción eficaz de escritos, gestión de equipos, transformación y liderazgo, así como charlas sobre comunicación eficaz con áreas de negocio y clientes no juristas.
Gestión Financiera y Comercial
El último objetivo del plan es proporcionar a los abogados jóvenes los conocimientos y habilidades necesarios para manejar eficazmente los aspectos financieros y comerciales de su práctica legal. Con ese propósito se impartirán formaciones en marketing, talleres sobre captación de clientes y charlas sobre técnicas de facturación. Además, se ofrecerá formación en contabilidad y gestión empresarial, así como información sobre impuestos para abogados, optimizando así su desempeño profesional y la rentabilidad de su ejercicio.
Perfil del abogado/a joven
Según el “I Estudio sobre la situación de la abogacía de Madrid” elaborado por el ICAM y GAD3, entre los abogados jóvenes (menores de 35 años) predomina la presencia de mujeres colegiadas, que suponen el 56% de las personas entrevistadas. Por norma general, el abogado joven, en la mitad de los casos (54%), es ejerciente y en siete de cada diez casos trabaja en un despacho (71%). En el caso de las mujeres, hay mayor proporción de ejercientes (56%) y que trabajan como abogado de empresa (24%).
Respecto a su situación laboral, siete de cada diez abogados jóvenes son asalariados (72%). Esta proporción es mayor entre las mujeres (75%) y entre los no ejercientes (84%). Un 22% trabaja como autónomo y un 7% se describe como ‘falso autónomo’.
En cuanto a los ingresos, aunque el salario medio del abogado joven es de unos 35.000 euros brutos anuales, hay una notable diferencia según dónde ejerza la profesión: así, los abogados jóvenes que trabajan como abogados de empresa o en despachos grandes consiguen unos ingresos casi un 40% superiores, alcanzando los 43.300 euros de media. En el otro extremo se encuentran los jóvenes profesionales que ejercen en despachos medianos o pequeños, con unos ingresos medios de 27.900 euros/año, o en despachos unipersonales, con 23.900 euros brutos al año.
Dificultades en los inicios profesionales
Los abogados/as jóvenes, en general, destacan la precariedad laboral y la falta de experiencia como las dificultades principales que se encuentran al iniciar su carrera profesional.
Entre los jóvenes que son ejercientes destacan una mayor precariedad laboral y una mayor dificultad en la captación de clientes que entre los no ejercientes. Entre los hombres, la captación de clientes despunta en mayor medida como una de las principales barreras para iniciar su carrera profesional. Por su parte, las mujeres hacen una mayor referencia a la falta de orientación profesional. Según el estudio del ICAM, los abogados/as jóvenes de despachos unipersonales muestran una mayor preocupación por la captación de clientes. Sin embargo, en los despachos grandes destaca la alta competitividad como una inquietud relevante.